¿Qué es el Sendero de Chile?

Sendero de Chile es una iniciativa de alto interés público, cuyo fin es levantar la gran plataforma para el desarrollo del ecoturismo y la educación ambiental del Chile del siglo XXI, realizando una efectiva protección del patrimonio cultural y natural del país, estructurada en base a un conjunto de senderos distribuidos a lo largo Chile, representativos de su gran diversidad de paisajes, culturas y ecosistemas, que pueden ser recorridos a pie, a caballo o en bicicleta.

Bajo un esquema de gestión que combina principios de participación ciudadana, comercio justo, turismo responsable y sustentabilidad; se incorpora a múltiples actores locales, provinciales y nacionales en un proyecto multipropósito, de alto impacto económico, social y cultural.
El Sendero de Chile se propone crear vínculos entre dos sectores de nuestra población, muchas veces distanciados en su cotidianidad social y en el reconocimiento mismo de su existencia. Dos grupos de ciudadanos que apenas dialogan e intercambian, pero que al encontrarse, trastocarán tanto la visión propia, como la imagen externa de nuestro país y su pueblo.
Por una parte, están aquellos interesados en conocer el país profundo, la diversidad de territorios, paisajes y culturas. Son personas que muestran un gran interés por viajar, y llevar una vida más saludable y placentera en contacto con espacios naturales.
Por otra parte, están los habitantes de los despoblados territorios por los que atraviesa el sendero -comunidades indígenas y agrícolas, colonos, arrieros y pescadores-, susceptibles de organizar como prestadores de servicios, al alero del encadenamiento de pequeñas empresas y organizaciones locales que se integran a la iniciativa; o bien incubando nuevos emprendimientos.
El encuentro de estos dos grupos de ciudadanos no sólo provocará un profundo cambio cultural en nuestra sociedad, sino que generará también nuevas relaciones económicas, a raíz del mayor gasto que se producirá en los territorios con la nueva demanda turística surgida por travesías y alojamientos para recorrer distintos tramos del Sendero de Chile.

TERRITORIO VALLES TRANSVERSALES DESTINO SAN FELIPE.

Orolonco:

Parque Las Carretas – Baños del Parrón – Estero el Zaino

La ruta que se extiende por un área precordillerana, una zona típicamente huasa, identificable por sus comunidades agrícolas dedicadas a la crianza de caprino, vacuno y equino y al cultivo de pequeñas superficies de forrajeras y productos tradicionales.

Recorrido

El trayecto comienza en el Parque Escultórico Cementerio de Carretas – donde se emplazan un gran número de esculturas y antiguas carretas- en la meseta El Llano, aproximadamente a 1 kilómetro de la Plaza de Putaendo. El sendero es apto para su uso durante todo el año, ya que clima existente en la zona es el tipo mediterráneo (templado cálido), presentando escasas precipitaciones entre los meses de junio y agosto.

El sendero avanza por el costado de las pircas que rodean la ladera norte del valle, hasta acceder al Parque Huasos de Sahondé, donde se encontrarán los servicios básicos para descansar. En el recorrido es posible tener acceso a vistas panorámicas del Valle de Sahondé, donde los predios agrícolas y poblados se dibujan entre los cerros.

Desde el Parque de Huasos Sahondé, declarado “Patrimonio Intangible” en el año 2004, la senda sigue hacia el Oasis Baños del Parrón, donde el sendero comienza a elevar su pendiente y se pueden apreciar vistas panorámicas del Valle de Rinconada de Silva, con sus tradicionales actividades agrícolas y ganaderas de la zona.

Las pequeñas quebradas conservan la vegetación nativa de matorral esclerófilo, donde destaca el Quillay, Guayacán y Colliguay. En el sector Baños del Parrón se respira tranquilidad y silencio, lo que permite disfrutar del contacto con la naturaleza. Destaca en la zona el Santuario de Cristo de Rinconada de Silva, que posee 14 estaciones del vía crucis, donde se realiza la tradicional festividad religiosa en conmemoración de la Virgen del Carmen, el último día del mes de febrero

Desde el oasis Baños del Parrón, la senda continúa por el Portezuelo de la Higuera, hacia la Quebrada de Ñipa, desde donde se puede ver el cerro Orolonco, que da nombre al recorrido. Este cerro da origen a múltiples vertientes, que de acuerdo a la leyenda local surgieron cuando la princesa picunche Orolonco, desafiando las tradiciones de su pueblo, se enamoró de un guerrero español. Al enterarse que éste había muerto, subió a la cumbre del cerro a llorar, sus lágrimas fueron tan abundantes, que formaron las vertientes que existen hasta el día de hoy.

La senda continúa por las laderas del cerro El Zaino y La Greda, bajando luego hacia el Estero el Zaino, la ruta permite visualizar el valle de Jahuel, zona de interés histórico y arqueológico, por la presencia de restos de culturas prehispánicas. El área es reconocida por sus extensas plantaciones de olivos, conservándose un antiguo y tradicional sistema para la elaboración de aceitunas, las que se producen dejándolas remojando en una mezcla de agua con cenizas llamada lejía.

Al llegar al sector de la Plaza de Intercambio El Zaino, se tendrá acceso al sector denominado Mesetas de Jahuel correspondiente a una explanada de hermosa vista, desde donde se puede observar el cerro El Roble y La Campana, un paisaje que también fue apreciado por el naturalista Charles Darwin, cuando recorrió este sector la zona central del país en el año 1834.

Recomendaciones:

Llevar agua en el recorrido, es recomendable 1 litro por persona, protección solar y sombrero.